Un ataque directo sobre Becky Lynch marcó el sorpresivo regreso de AJ Lee a WWE después de más de diez años. El altercado ocurrió durante la transmisión de SmackDown del 5 de septiembre en Chicago, ciudad natal de su esposo, CM Punk, y representó su primera aparición en la empresa desde su retiro en 2015 por una lesión en la columna.
La confrontación se desató momentos después de que Lynch abofeteara en repetidas ocasiones a Punk dentro del ring. Fue el propio Punk quien introdujo a Lee ante el público, lo que provocó la reacción inmediata de la excampeona contra la luchadora irlandesa, escalando la rivalidad personal entre ambas parejas.
La fisicalidad vista en la arena no fue un acto aislado, sino el primer paso de un regreso oficializado por la propia empresa. Poco después del programa, Triple H confirmó la contratación de Lee a través de redes sociales, publicando imágenes donde se le ve firmando su nuevo contrato en los vestuarios antes del inicio del evento.
Esta nueva dinámica, nacida del altercado en Chicago, ya tiene un posible siguiente capítulo. La expectativa es que AJ Lee y CM Punk formen equipo para enfrentarse a Becky Lynch y Seth Rollins en un combate mixto en Wrestlepalooza, el próximo 20 de septiembre. La tensión entre ambos bandos se intensificó en el evento Clash in Paris, cuando Lynch intervino para ayudar a su esposo, Rollins, a retener el Campeonato Mundial Peso Pesado contra Punk.
Más allá del conflicto inmediato con Lynch, las ambiciones individuales de Lee en esta nueva etapa ya parecen claras. Tras finalizar la transmisión de SmackDown, fue vista sosteniendo el Campeonato Femenino Intercontinental de WWE, indicando un posible interés en competir directamente por ese título.
