Mercedes Moné sigue siendo la Campeona TBS de AEW, pero su defensa titular en AEW All Out contra una incansable Riho no fue para nada limpia. La «CEO» tuvo que recurrir a tácticas sucias para asegurar la victoria en el Scotiabank Arena de Toronto.
El problema para Moné fue que Riho, la primera Campeona Mundial Femenina de AEW, dominó gran parte del combate. La retadora puso en aprietos a la campeona con una ofensiva constante, buscando la victoria con combinaciones como el La Magistral Cradle y un Crucifix Pin. El momento clave de su dominio llegó cuando atrapó a Moné en su propia llave de sumisión, el Statement Maker.
A pesar de la presión, Moné demostró por qué es la campeona con algunos momentos de alto impacto. Conectó un espectacular Meteora desde la mesa de comentaristas y, de vuelta en el ring, rindió homenaje a una leyenda con la combinación de Suplexes Three Amigos. Sin embargo, ni siquiera eso fue suficiente para mantener a Riho en la lona para la cuenta de tres.
La desesperación de Moné se hizo evidente en la recta final de la lucha de dieciséis minutos. Atrapada en otra llave de sumisión, su única salida fue agarrar al árbitro y girarlo para que no pudiera ver lo que pasaba.
Con la vista del oficial bloqueada, Moné aprovechó para atacar los ojos de Riho con un golpe ilegal. Inmediatamente después, conectó un Lung Blower seguido de su finisher, el Moneymaker, para conseguir la victoria por pinfall.
Esta victoria, aunque polémica, permite a la «CEO» continuar con su objetivo declarado: romper el récord de Ultimo Dragon como la persona con más títulos ganados en la historia del pro-wrestling.
That was a dirty trick, @MercedesVarnado!
— All Elite Wrestling (@AEW) September 20, 2025
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