
Para Shawn Michaels, la historia es clara: su carrera como luchador terminó en WrestleMania 26 contra The Undertaker. El polémico combate de parejas en Crown Jewel 2018, según él, simplemente no cuenta.
La aclaración llegó durante una entrevista con Chris Van Vliet, donde «HBK» explicó por qué ese regreso en Arabia Saudita, en el que hizo equipo con Triple H para enfrentar a The Undertaker y Kane, nunca tuvo el peso emocional para ser considerado el cierre de su carrera.
El problema, para él, es que ese evento fue más una oportunidad para reunirse con sus amigos de D-Generation X que un capítulo final de su legado. Fue, en sus palabras, algo más parecido a una diversión.
«Por eso esa lucha no significa nada para mí, no me afecta. No la considero mi última lucha. Mi última lucha es la que tuve con The Undertaker», afirmó Michaels.
Para explicarlo mejor, hizo una analogía bastante clara: fue como si «KISS saliera de gira sin los miembros originales para dar un show».
Michaels traza una línea muy clara entre el artista y la persona. Su actuación en WrestleMania 26 fue el cierre perfecto para la carrera de «HBK, Mr. WrestleMania». Otras apariciones, como cuando fue árbitro en un combate entre Triple H y Undertaker, tampoco forman parte de su historial oficial como competidor.
«Pareció un evento especial, separado y único», explicó.
Aquello en Arabia Saudita fue simplemente un tipo saliendo con sus amigos a divertirse en un combate. La carrera del artista, del «Mr. WrestleMania», terminó con Taker en ese escenario. Todo lo demás, según él, fue algo completamente aparte.